Ir al contenido principal

Delirio

La semana pasada tuve fiebre, mucha fiebre. En el delirio, era un espía ruso al que estaban entrenando para asesinar a un miembro importante del partido nazi. Como era muy valioso para los rusos, me movían constantemente en tren de un lugar a otro y no permitían que nadie me viera. Me sometieron a cirugía plástica para que pareciera una persona muy allegada a quien iba a asesinar. Todo el día me sometían a pruebas e interrogatorios para asegurarse de que conocía el plan a la perfección, que los alemanes no nos podían descubrir. Me estaban transformando en otra persona.

Tenía frío, mucho frío, porque era invierno y afuera estaba nevando. En los cuartos donde me tenían, en los trenes, no había nunca calefacción. Tampoco me estaba permitido fumar, aunque no entiendo muy bien por qué. Cuando me dejaban sólo, a veces me dejaban sólo, siempre había un hombre sentado justo fuera de la puerta de mi cuarto. Todos los cuartos eran iguales. Recuerdo los techos pintados de blanco, las tuberías rojas y azules. Recuerdo un aroma antiséptico, como el de un hospital.

En el delirio, recuerdo, yo tenía un imposible ejemplar de Ficciones traducido al ruso. Yo leía "El jardín de los senderos que se bifurcan" porque entendía que en la historia estaba escondida una clave, quizá del futuro, quizá del papel que tendría yo que jugar en la guerra. El libro y mis ropas eran las únicas pertenencias que se me permitían.

No sé si habré logrado mi cometido, porque eventualmente la fiebre cedió y se fue el delirio. Lo que si sé es que no puedo encontrar mi ejemplar de Ficciones. Creo que lo olvide cuando bajé del último tren.

Comentarios

nacho dijo…
Dulces sue�os, je, y cuidado de no olvidar nada en los trenes... por cierto, �le�ste Los trenes van al purgatorio de Rivera Letelier?
Saludos... nacho m.
John B. dijo…
Cuando yo tengo fiebres, solo me siento "como la muerte recalentado," como decimos en Tejas. Quiero tener una fiebre, solamente una, como la tuya.
Unknown dijo…
Muy bonita narración

Entradas más populares de este blog

¿Qué hace a un cuento?, 1

En el blog de Federico Escobar se ha abierto una pequeña polémica en torno al premio Juan Rulfo 2009 , otorgado por Radio Francia International. El premio lo obtuvo el argentino Mariano Pereyra Esteban por «El metro llano» , con la novedad de que la organización ha puesto disponible el cuento ganador para su descarga. (Huelga decir que sería un buen momento para leerlo antes de seguir leyendo.) La nota expresa su extrañeza a que dicho texto haya ganado el premio. En los comentarios del blog el autor del cuento responde a los cuestionamientos de manera bastante mesurada y acertada, a mi parecer. Gracias a esta actitud es posible entender que por sobre las reticencias de Escobar se encuentran visiones opuestas de lo que debería ser un cuento. Dice Escobar: Ahora, sí creo que el cuento pretendía ser humorístico, tanto como pretendía ser artificioso en el lenguaje. Creo que cualquiera que lea el cuento estaría de acuerdo con que está escrito en un registro humorístico; cuando dije que el t

La noche boca arriba: el juego

La noche boca arriba es un juego de rol para dos personas, que necesita de lápiz, papel y un mazo de cartas. Un juego de rol basado en el cuento de Julio Cortázar: A veces, Jorge es un candidato a paciente de psiquiátrico, pero otras veces lidera un batallón de caballería enfrentado al ejército inumerable del Rey No Muerto. El propio Jorge sospecha que sólo una de estas realidades puede ser auténtica… ¿pero cuál? Ganador del desafío Pirmero Tira, Luego Hablamos, aparece en versión de playtest listo para descargarse. Descarga La noche boca arriba: el juego de rol (playtest)