Ir al contenido principal

Leyendo The Pale King, 1

Como casi todo el resto del mundo, estoy leyendo The Pale King de David Foster Wallace. Como casi todo el resto del mundo, lo leo con una mezcla de asombro, envidia e indignación.

Asombro porque estamos ante la prosa de un maestro en la cúspide de sus facultades. Aunque decir maestro es poco. Están los grandes maestros, como Dostoievski, Borges, Chekov, Bolaño, Bellow, Cortázar o Barthelme (para quedarnos en las primeras letras del abecedario) y luego están los superatletas de la literatura, los Federer, Jordan o Phelps, personas con aptitudes sobrehumanas para las letras como Joyce, Valéry o Rimbaud. David Foster Wallace entra en esta última categoría, con la salvedad agregada de que estaba en la primera liga, era un profesional, no un amateur.

Envidia porque ante un titán de la literatura cualquiera que haya intentado hilar dos frases juntas no puede sino postrarse. Lo cierto es que una mente normal, bien entrenada, puede llegar a escribir como, digamos, Carlos Fuentes o Phillip Roth, o incluso eligiendo un camino menos profundo pero más espectacular, Cormac McCarthy o García Márquez. Pero llegar al nivel de aptitud de Foster Wallace está reservado a unos cuantos. No es, repito, sólo que Foster Wallace tuviera una aptitud anormal para la escritura, sino que entrenó toda su vida para sacarle el mayor provecho. También porque sabía bien que con un gran poder viene una gran responsabilidad y no dejó que su obra se demorara en los placeres de la fama sino que intentó ponerla al servicio de un bien mayor.

Finalmente, indignación porque es una novela inacabada. Desde que se lee la nota del editor, se levanta la sospecha de qué habría sido este libro si su autor hubiera tenido un par de años más para terminarlo.

Y pasadas un poco más de cien páginas, me vienen unas cuantas ideas a la cabeza:

Es una novela mucho más accesible que Infinte Jest. Incluso más accesible que The Broom of the System. He pensado mucho, a propósito de Gravity's Rainbow, que Pynchon no volvió a escribir algo tan difícil de leer. Si bien no sabemos cuál fuese la idea final de Wallace, parece que él también hubiera abandonado la complejidad excesiva. Se me ocurren dos posibilidades: que un cerebro humano no puede soportar una empresa del tamaño de Jest o Rainbow más de una vez en la vida o bien que un autor maduro —tanto La broma como El arcoiris son obras de relativa juventud— descubre que finalmente sí hay un nivel donde la forma vence al fondo, y es algo que sólo aprende a dominar con la sabiduría que trae la edad.

Ahora, si bien abiertamente el libro trata sobre el aburrimiento (o incluso sobre la heroicidad del aburrimiento) me queda la idea de que el verdadero protagonista de The Pale King es la vida interior o, para ser más específico, la vida de la mente. Esa es al menos la hipótesis de lectura con la proseguiré la lectura.

Pienso, también, que el 90% de las reseñas que ya han salido de The Pale King no necesitaban ir más allá de las ciento y pico de páginas que he leído para ser escritas.

A propósito de estas reseñas, hay un detalle que me molesta en particular, y es que todos argumentan que no pasa mucho en la novela. Pero para que no pase nada, pasa nada con un sumo grado de violencia:

Right before 1965’s big Halloween UNICEF collection threesixth-graders accost the boy in the southeast restroom after fourth period and do unspeakable things to him, leaving him hanging from a stall’s hook by his underpants’ elastic; and after being treated and released from the hospital (a different one than his mother is a patient in the long-term convalescent ward of), the boy refuses to identify his assailants and later circumspectly delivers to them individualized notes detailing his renunciation of any and all hard feelings about the incident  [...]
*
Her second experience of the kind her books made seem sweet through indifferent speech had occurred in the abandoned car in University City MO at the hands of a man who knew how to dislodge one coat hanger with the straightened hook of another and told her face beneath his fingerless mitten there were two different ways this right here could go.


Y una última idea: me molesta que todos se pregunten si podremos leer The Pale King sin pensar en el suicidio de David Foster Wallace. ¿Qué pinta su suicidio en esta novela, más allá del mórbido juego de marketing en torno a esta novela?

Comentarios

Cómo siempre, puntual y afilado, René. Oye, sé que te atosigan las preguntas pero, sabes cuándo saldrá en español The Pale King.
Saludos.
Unknown dijo…
Sí, lo edita Random House en España en noviembre, en traducción de Javier Calvo.
Gracias, René. Saludos.
Luis Panini dijo…
René,

Le diste al clavo. "The Pale King" trata sobre la vida de la mente...Ya tengo qué decir cuando alguien me pregunte "¿y de qué va?".

Mientras la leo no pienso en que estoy leyendo una novela inconclusa, así que no me incomoda o indigna el hecho de que DFW no haya logrado terminarla o, más bien, haya decidido no terminarla. La novela bien podría terminar en cualquiera de sus capítulos. No requiere de final o resolución. De hecho, pienso que esto último actuaría en su contra.

Desesperado por leer tu siguiente reseña.

Entradas más populares de este blog

Bohemian Rhapsody

Primeras impresiones de Bohemian Rhapsody Ok. Bohemian Rhapsody . Esta película me provoca sentimientos encontrados. Tiene muy buena factura. Algunos de los efectos especiales no son de la mejor calidad, pero es una biopic con efectos especiales: eso habla de un deseo de contar la historia de la mejor manera posible. El diseño de arte y el vestuario soberbios. Quizá dignos de un Oscar. ¿Pero la historia? No puedo ser nada objetivo porque no sólo me sabía la letra de todas las canciones, también sabía todas y cada una de las cosas que iban a pasar, incluyendo muchos de los diálogos. Pero me queda la impresión de que la historia nos queda debiendo mucho. Quizá sea el cambio de director a media producción, quizá la intromisión de los miembros sobrevivientes de la banda que cuidan demasiado la imagen de Mercury, quizá sea, como dice Brian May a media película, que las audiencias norteamericanas –para las que existe esta cinta– son puritanas en lo público y perversas en lo privado, pero...

Twin Peaks: El retorno

Twin Peaks o los hombres que no amaban a las mujeres Advertencia: este texto contiene la revelación del misterio esencial de las primeras dos temporadas de Twin Peaks: quién es el asesino de Laura Palmer. Revela más bien muy poco de las líneas argumentales de la tercera temporada, si bien su intención es esbozar algunas líneas para reflexionar sobre su desenlace. El 26 de abril de 1990, unos 17 millones de personas vieron lo que muchos críticos califican como una de las escenas más graciosas e inquietantes de la historia de la televisión. En el cuarto episodio de la primera temporada de Twin Peaks , “Rest in Pain”, un desconsolado Leeland Palmer —en una gran interpretación de Ray Wise— se lanza sobre el féretro de Laura, su hija asesinada, durante el entierro. El mecanismo elevador del ataúd se activa y padre e hija descienden juntos al agujero en la tierra, pero una avería provoca que se eleve de nuevo. Mientras Ray llora sobre la caja que contiene al cuerpo de su hija, el féret...

Archive 81, el podcast del año

Por segundo año consecutivo el mejor libro que leo no es un libro sino un podcast. Acaba de concluir la tercera temporada de Archive 81 , que podría describirse como una cruza entre H.P. Lovecraft, David Lynch, Jeff VanDerMeer y Agustín Fernández Mallo (aka everything good in life). Cada una de las temporadas es muy diferente entre sí, pero esta tercera, sobre un par de hermanos que tratan de llevar a cabo un ritual para volverse dioses, con ayuda de un ser que sólo existe cuando lo grabas y una caseta telefónica que colecciona miembros humanos, alcanza unos niveles de horror, humor y maravilla excepcionales en el guión, un diseño sonoro y una actuación de voz soberbia. El capítulo 6 quizá sea uno de los mejores capítulos de un audiodrama en la historia, por la manera en que reúne y resuelve ideas e hilos narrativos de dos temporadas y media (piensen parte 8 de Twin Peaks: The Return). El capítulo 9, un hermoso homenaje a House of Leaves , pudo haber sido el mejor capítulo de ...