La resistencia a aceptar los contenidos y planteamientos emanados de la cultura de consumo suele plantearse como una forma sensata de conservadurismo: la literatura entendida como refugio de la Cultura contra la barbarie audiovisual. Pero ¿qué concepción de la cultura es esta? ¿Qué entienden por «cultura» los que detentan el poder literario en este país? Una breve aproximación, reductiva pero no por ello menos útil, podría realizarse siguiendo el modelo del Estupidario de Flaubert. ¿Arte? Desde la aparición del arte conceptual todo es fraude y una chorrez (excpeto algún Barceló, algún Antonio López, alguna cosa más o menos figurativa). ¿Pensamiento? La deconstrucción francesa y sus derivaciones han acabado con él; sólo vale algún Marina, algún Steiner. ¿Feminismo? Una secta de resentidas. ¿Teoría cultural? Cuatro friquis parolteando sobre ciencia ficción. ¿Cine? Cinefilia, mitomanía y la parte más respetable de la Paramount; hasta ahí vale, pero en llegando a Godard, el videoarte y el cine para museo, todo un tostón. ¿Cómics? Una memez, pero parece que van mejorando: hace poco se ha publicado una cosa sobre el Holocausto que irá bien para los niños. ¿Música? U2 tienen su ritmillo, el novio de mi nena me ha grabado un cedé; ahora que, entre Arcade Fire, Tortoise y John Zorn, todo me suena igual. ¿Psicoanálisis? Freud se picaba a su cuñada y Lacan era severo; de todos modos, el vocabulario psicoanalítico resulta muy útil para insultar, como el del capitán Haddock. ¡Valiente refugio es ése! Una concepción del conocimiento definida por la exclusión y el menosprecio, en que el término «cultura» ha quedado reducida a la literatura über alles, y aun la literatura a algunas formas muy particulares de novela publicadas por editoriales de gran alcance.
—Eloy Fernández Porta: Afterpop. La literatura de la implosión mediática.
Comentarios
P.d finalmente comencé a leer El Arco Iris de la Gravedad. Que alguien m,e ayude de mí mismo
Un saludo
Lo bueno de que los libros te dejen apretado de dinero es que puedes invertir el tiempo necesario en leerlos.